Brasil invertirá $ 11 millones para explorar minerales en el Océano Atlántico
ONU autoriza la minería submarina durante 15 años en la zona alta del estado de São Paulo, situada 1500 kilómetros de la costa brasileña.
El Brasil da el lunes (9) un nuevo paso en la ambición de avanzar en la creación de un proyecto de minería submarina. Un reto que implica el desarrollo de nuevas tecnologías, la capacitación de mano de obra calificada y la ocupación del espacio geopolítico en el Atlántico Sur.
Estos son algunos de los objetivos de acuerdo con las Naciones Unidas (ONU) para explorar el ascensor llamado el Alto Río Grande, una enorme roca en alta mar compuestas de alta mazorca, hierro y manganeso negociados. El gobierno federal y la ONU han firmado un contrato que le dará al país el derecho exclusivo de explotación de un mineral reserva de 1.500 kilometros de la costa de Río de Janeiro.
El director del Servicio Geológico de Brasil (CPRM), Roberto Ventura, dice que invertirá US $ 11 millones en el plan de trabajo asumido con la organización internacional para los primeros cinco de los 15 años del contrato. El acuerdo le da a Brasil el derecho a estudiar y explotar económicamente los recursos minerales en un área de 3 kilómetros cuadrados, divididos en 150 bloques de 20 kilómetros cuadrados cada uno. «Yo diría que este es geoestratégica importante porque Brasil se juega su bandera en una región que era océano internacional», dice el director.
El Brasil entra, así que para un grupo de países celeto con permiso similares otorgada por la Autoridad de los Fondos Marinos (ISBA), la división de la ONU. Los recursos de los fondos marinos se toman como la «nueva frontera de minerales», según Ventura.
La retirada de estos fondos, sin embargo, impone como un gran desafío para el desarrollo de tecnologías para hacer posible la operación comercial y ambientalmente seguro. Este es exactamente el paso que Alemania, China, Corea del Sur, Japón, Noruega y Rusia están dando garantizados por la ISBA. El Brasil ahora sigue el movimiento.
El director de Geología y Recursos Minerales CPRM explicado que la elevación del Alto Río Grande tiene alrededor de 400 kilómetros cuadrados identificados como parte de la Plataforma Continental de Brasil, el territorio del país desde el subsuelo que se extiende hacia el océano. «Es como una parte de la plataforma brasileña que está detrás de nosotros «, dice Ventura.
La elevación es visto como algo de una cordillera sumergida con el movimiento de las placas tectónicas durante la separación de Brasil y África. Los expertos llaman la comarca de ‘brasileña Atlantis’, en referencia a la ciudad hundida mitológico.
La zona está fuera de la Zona Económica Exclusiva (ZEE), una distancia de 370 km de la costa, donde Brasil puede explorar los recursos sumergidos como el aceite de pre-sal. Así que tuve que pedir autorización de la ONU, después de que el proyecto de expedición brasileña al Atlántico Sur, que tuvo lugar en los últimos cinco años, demostrar la existencia de minerales.
La expedición recibió R $ 60 millones del Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC) en estos cinco años. La cantidad se utilizó en los estudios realizados por la CPRM con centros de investigación y universidades.
El trabajo estaba bajo c OORDINACIÓN la Comisión Interministerial para los Recursos del Mar, que reúne a 17 ministerios y la Marina de Brasil.
Fuente: Portal Brasil
